Eligiendo jueces constitucionales: las designaciones de ministros de la Suprema Corte (1995-2015)
El 5 de diciembre de 1994, cuatro días después de tomar posesión como Presidente, Ernesto Zedillo promovió una reforma constitucional para modificar las estructura y competencias de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). La reforma expandió sus atribuciones de control constitucional, redujo de 26 a 11 integración, estableció un periodo fijo de 15 años para sus ministros, y configuró un método de designación compuesto de dos elementos principales: nominación presidencial a través de ternas y elección del Senado mediante una mayoría calificada de dos tercios de sus integrantes. En el periodo 1917-1994, se realizaron en promedio 2.6 designaciones por año. En cambio, a más de dos décadas de la reforma de 1994, se han designado 23 ministros, incluidos los 11 que asumieron el cargo en 1995. De hecho, por primera vez en la historia de México, la integración de la SCJN permaneció inalterada durante ocho años (1995-2003), conforme a lo previsto en el calendario definido en las disposiciones transitorias de la propia reforma de 1994. De las 12 vacantes que se han abierto desde 2003, nueve resultaron de la conclusión de los periodos en el cargo de las personas designadas en 1995; las tres restantes derivaron del fallecimiento de ministros en funciones. La investigación empírica sobre las instituciones judiciales mexicanas ha florecido en las últimas décadas. Sin embargo, el análisis de las designaciones de ministros continúa concentrándose en el diseño de la ley. Aunque la literatura en la materia ha arrojado importantes conclusiones sobre los efectos de un método dominado por el ejecutivo, aún no se cuenta con estudios que expliquen, por ejemplo, por qué el Senado ha rechazado las primeras ternas enviadas por el Presidente en cuatro de los últimos 12 proceso de designación. El objetivo de este trabajo es analizar empíricamente los procesos de designación realizados en el periodo 1995-2015. Para ello, utilizando al process-tracing como principal herramienta metodológica, se presta atención al diseño del método de designación, pero también a tres factores que inciden en dichos procesos: a) anticipación de las nominaciones; b) composición del Senado; y c) perfiles de los candidatos.